Consejo de cortinas. Viñeta sábado en
Soy de los que no falta ni un viernes a la cita con el Consejo de Ministros, esta perversión no es nueva. Ya desde hace años sigo plenos de pueblos, sesiones de la junta de aquí o de allá y todo acto político que se emite en directo. Cualquier cosa que sospeche que pueda tener chicha.
No me gustan los resúmenes que sirven los medios. La mayoría se instalan en el método de la repetición sumisa de los mensajes institucionales o jalean frases sueltas sin contextualizar. Dejan arrumbadas muchas pistas y temas "menores" que no lo son tanto. O al menos no lo son para mí. Es lo que dicen, pero también cómo lo dicen.
El Consejo de Ministros del viernes pasado fue un discurso monotema sobre la reforma eléctrica. Para anunciar lo que anunciaron hubiera bastado una nota de prensa a los numerosos medios que les sirven la propaganda fresquita y sin cortar.
El discurso político siempre ha tenido retórica, literatura sobrante y adornos florales pero ha llegado a unos límites en los que se han ido enfangando tanto con palabrería hueca de relleno y terminología de nuevo cuño que han conseguido justo lo contrario de lo que siempre pregonan. La huida masiva de personas interesadas por lo que dicen.
Y hacer que se recupere el interés general del ciudadano común por la política costará décadas, porque han logrado que se instauren reacciones automáticas basadas en la sentencia popular de que todo son cortinas de humo para no hablar de "lo importante".Y lo peor es que es justo lo que parece.
Pero es que cuando alguien habla de los que supuestamente es importante se tilda de oportunismo y demagogia o es otra cortina interesada que tapa otra cortina que es más importante. Al final la confusión se come todas las supuestas cortinas con papas.
Y esto beneficia a los de siempre.
La luz sube un 3,2%
