
Esta viñeta forma parte de las pruebas presentadas en una demanda federal interpuesta el 26 de agosto por el agente de policía de Chicago Anthony Banks, en la que alega acoso racial, represalias y un entorno laboral hostil en el Departamento de Policía de Chicago (CPD).
En marzo, el agente recibió un correo electrónico en su teléfono móvil de trabajo con la imagen.
Según la demanda, el mensaje contenía esta viñeta de un hombre negro de cabeza grande, labios desproporcionados y una nariz ancha. Sobre la imagen aparece la pregunta: "¿Cuando se siente un negro más frustrado?". Y debajo la respuesta: "¡Cuando intenta volarse los sesos!".
La viñeta, sin firma, presenta a un hombre con una pistola en la boca y una lágrima que cae de su ojo mientras una bala sale por su cabeza, donde presenta otros dos agujeros de bala. Un bocadillo de pensar con una texto en inglés mal escrito (se entiende que deliberadamente) reza: "¡Maldición… fallé otra vez!".
Banks está representado por el bufete de abogados Blake Horwitz. Su demanda describe supuestas experiencias de hostilidad racial en el departamento, donde, según él, los agentes negros rara vez se pronuncian o desafían la discriminación. La demanda nombra a varios agentes del CPD en lo que se describe como actos "explícitos" de racismo.
Según la demanda, la viñeta fue enviada al día siguiente de que Banks interviniera en una acalorada confrontación el 17 de marzo entre una mujer embarazada y un compañero oficial. Después de ver cómo el agente empujaba a la mujer, Banks intervino para calmar la situación, según informaron ABC 7 Chicago, CBS Chicago y muchos otros medios.
Más tarde ese mismo día, dentro de la comisaría del distrito de Harrison, otros agentes se enfrentaron a Banks y lo rodearon. Al parecer, le gritaron insultos racistas, incluida la palabra "negro" usada despectivamente, y le dijeron que "volviera al lugar de donde había venido". Los agentes también hicieron referencia a su anterior destino en el distrito 3 de Grand Crossing, conocido por su fuerza policial predominantemente afroamericana y le "invitaron" a que volviera allí.
La denuncia alega además que los agentes impidieron a Banks salir de la sala hasta que intervinieron dos sargentos. Banks denunció el incidente al teniente Nari Haro, uno de los demandados, y se le ordenó que redactara un "confidential memo" (memorando interno destinado a ser compartido solo con personal autorizado). Dicho informe confidencial se filtró posteriormente en Internet, lo que supuestamente provocó más represalias.
El 18 de marzo, Banks recibió la caricatura racista, que según la demanda fue enviada por uno de los agentes implicados en el incidente anterior.
El abogado Blake Horwit calificó la caricatura como «el ejemplo más perverso desde el punto de vista racial» que ha visto jamás, comparándola con el racismo de la década de 1950 en Misisipi. En la demanda se alega que uno de los agentes implicados en el acoso fue el que envió la imagen amenazante.
La demanda alega violaciones de los derechos de Banks en virtud de la Cuarta Enmienda, alegando que fue detenido ilegalmente en la comisaría sin causa probable. También cita violaciones de la igualdad de protección basadas en acoso por motivos raciales, represalias y la divulgación no autorizada de información confidencial.
Banks se encuentra actualmente de baja médica, alegando estrés emocional y preocupación por su seguridad. La demanda solicita una indemnización por salarios perdidos, angustia emocional y honorarios de abogados, así como reformas institucionales para abordar el racismo sistémico dentro del CPD.
Un policía negro jubilado declaró a The Chicago Crusader, un periódico semanal afroamericano que se distribuye en Chicago, que existe racismo en el Departamento de Policía de Chicago, especialmente hacia los agentes negros que expresan abiertamente su opinión.
Horwitz dijo que el caso pone de relieve la cultura de hostilidad del departamento. "Este caso ilustra la cultura tóxica que existe dentro del departamento de policía de Chicago, donde un agente que hace lo correcto al calmar una interacción entre la policía y un civil se convierte en blanco de la hostilidad racial de sus propios colegas".