Caso Mediador. Viñeta del 05/03/2023 en CTXT
Al caso Mediador le metes un torero y un cura y no hay versión de Torrente que pueda superarlo.
El que se supone que era el presunto jefe de la banda es el ex diputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes Curbelo, más conocido como "Tito Berni", que renunció como diputado el pasado 14 de febrero y fue expulsado del partido.
El segundo integrante de la cuadrilla era el general retirado de la Guardia Civil Francisco Espinosa Navas, de que se dice aquí que era "un hombre «simpático», «dicharachero», de los que «te tronchas con él», contador de chistes y con un gran don de gentes.
En la casa de Madrid del antiguo picoleto se encontraron 61.110 euros en fajos de billetes que se suponen de "ilícita procedencia" (él dice que los sacó del banco y de vender una casa). Tenía la pasta repartida por distintos lugares de su domicilio, además, en otra casa del colega en Sevilla se encontró un arma de guerra, un subfusil Star modelo Z45 de mediados de los 40 con numeración de la Guardia Civil y dos cargadores.
El tercer perla es Marco Antonio Navarro Tacoronte, alias "el mediador," que además de darle nombre al caso, es todo un personaje en el más amplio sentido de la palabra. Navarro, con un historial delictivo muy gracioso, ha señalado ya un a un buen número de políticos y dice que si tiene que pagar por sus delitos irá a la cárcel, pero que se llevará a unos cuantos con él.
Además de esta gente, hay al menos nueve personas más que están siendo investigadas.
Se supone que estos tres montaron un tinglado para cobrar mordidas y extorsionar a empresarios y hasta tenían su lenguaje en clave para tratar sus trapicheos por teléfono.
Las principales figuras de la supuesta trama captaban a empresarios del sector agrario y ganadero de Canarias para ofrecerles "privilegios” en materia de contratos públicos a cambio de pagar un “peaje” de 5.000 euros. A los que no pagaban por el aro se les extorsionaba amenazándoles con inspecciones o de retirarles las ayudas europeas.
Y todos estas supuestas fechorías, cometidas en 2020 y 2021 es lo que investiga la magistrada del Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz de Tenerife María de los Ángeles Lorenzo-Cáceres que les imputa los delitos de cohecho, blanqueo de capitales, falsificación, pertenencia a organización criminal y tráfico de influencias.
Ahora, el picoleto carga contra el mediador y dice en un escrito al juzgado que se considera una «víctima de la pérfida estafa urdida» por el mediador y asegura que su único delito ha sido «fanfarronear» en alguna ocasión.
La cuestión es que este caso tiene su poquito de todo lo rancio y sórdido de la corrupción más chusca, puteros, drogas y fiestas. Tito Berni lo niega todo, pero a poco que se busque se pueden ver fotografías que dicen lo contrario.
Para que no falte de nada, el asunto también tiene ladrillo porque ahora la Guardia Civil dice que ve irregularidades en obras en cuarteles adjudicadas por 3,3 millones a un constructor que aparece en el sumario del caso Mediador.