Cumbre de paz, viñeta del 22/10/2023 en CTXT
La cumbre de paz del 21 de octubre se organizó de bulla y corriendo y se clausuró casi de la misma forma y sin acuerdo.
Aunque allí se encontraba el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, no había representantes de Hamás ni de Israel y Estados Unidos sólo envió a un funcionario de su embajada en Egipto.
Para muchos de sus participantes no fue más que otra oportunidad para lucir palmito internacional y navegar en medias tintas con los clásicos "sí, pero no" obviando distraídamente la brutalidad histórica de los que dicen ejercer su derecho a la defensa como excusa trapera para diezmar a la población sin ningún miramiento o volver a expulsarla de sus tierras.
Ahí tienen el comunicado de prensa de la Presidencia de la República Árabe de Egipto con sus conclusiones de la cumbre:
Por invitación de la República Árabe de Egipto, dirigentes, jefes de gobierno y enviados de varios países regionales e internacionales se reunieron en El Cairo el sábado 21 de octubre de 2023 para celebrar consultas y estudiar formas de avanzar en los esfuerzos encaminados a contener el agravamiento de la crisis en la Franja de Gaza y lograr una distensión militar entre las partes israelí y palestina. La escalada se ha cobrado miles de vidas de civiles inocentes desde el estallido de los enfrentamientos armados el 7 de octubre.
Con la convocatoria de esta cumbre, la República Árabe de Egipto ha querido construir un consenso internacional que trasciende culturas, razas, religiones y posturas políticas, cuyo núcleo son los valores de la humanidad y su conciencia colectiva que rechaza la violencia, el terrorismo y el homicidio ilegítimo de almas, que exige el fin de la guerra en curso que se ha cobrado la vida de miles de civiles inocentes tanto en el bando palestino como en el israelí, que exige que se respeten las normas del derecho internacional y del derecho internacional humanitario, que subraya la importancia fundamental de proteger a los civiles y de no exponerlos a peligros y amenazas y que concede especial prioridad a facilitar el acceso, garantizar el flujo de ayuda humanitaria y de socorro y hacerla llegar a los beneficiarios adecuados de la población de la Franja de Gaza. Este consenso también advierte de los peligros de que el conflicto actual se extienda a otras zonas de la región.
Egipto espera que los participantes lancen un llamamiento global por la paz, en el que coincidan en la importancia de reevaluar la estrategia internacional para abordar la cuestión palestina en las últimas décadas, a fin de salir de la crisis actual con un nuevo espíritu y voluntad políticos que allanen el camino para desbloquear un proceso de paz real y serio. Ello deberá conducir, en un breve plazo de tiempo, a la creación de un Estado palestino independiente, a lo largo de las fronteras de junio de 1967, con Jerusalén Este como capital.
La escena internacional de las últimas décadas ha puesto de manifiesto una grave deficiencia a la hora de encontrar una solución justa y duradera a la cuestión palestina, porque trató de gestionar el conflicto y no de ponerle fin de forma permanente. Se limitó a ofrecer soluciones temporales y analgésicas que no están a la altura de las aspiraciones mínimas de un pueblo que ha sufrido durante más de 80 años la ocupación extranjera, los intentos de borrar la identidad y la pérdida de la esperanza. La guerra en curso también ha revelado una deficiencia en los valores de la comunidad internacional a la hora de abordar las crisis. Mientras vemos que en un lugar se apresuran y compiten por condenar con prontitud la matanza de inocentes, en otro lugar encontramos incomprensibles vacilaciones a la hora de denunciar el mismo acto. Incluso vemos intentos de justificar esta matanza, como si la vida del ser humano palestino fuera menos importante que la de otras personas.
Las vidas que se pierden cada día durante la crisis actual y las mujeres y niños que tiemblan de terror bajo los ataques aéreos las veinticuatro horas del día obligan a que la respuesta de la comunidad internacional esté a la altura de la gravedad del acontecimiento. El derecho de la persona palestina no está excluido de otros a los que incluyen las normas del derecho internacional humanitario ni de los convenios internacionales que abordan los derechos humanos. El pueblo palestino debe disfrutar de todos los derechos de los que disfrutan los demás pueblos, empezando por el derecho más importante, que es el derecho a la vida, y su derecho a encontrar una vivienda segura, una atención sanitaria decente y educación para sus hijos y, sobre todo, debe tener un Estado que encarne su identidad y al que se sienta orgulloso de pertenecer.
La República Árabe de Egipto, que tomó la iniciativa de convocar la Cumbre de Paz, expresa su profundo agradecimiento a los países y organizaciones que respondieron a la invitación a pesar de las limitaciones de tiempo.
En esta ocasión, confirma que no escatimará esfuerzos para seguir trabajando con todos los socios a fin de alcanzar los objetivos que exigieron la celebración de esta cumbre, independientemente de las dificultades o de la duración del conflicto. Egipto mantendrá siempre su firme posición de apoyo a los derechos palestinos, creyendo en la paz como opción estratégica e irreversible hasta que se haga realidad la visión de una solución basada en dos Estados, palestino e israelí, que convivan uno al lado del otro.
En el marco de los esfuerzos de Egipto por alcanzar estos nobles objetivos, nunca aceptará llamamientos a liquidar la causa palestina a expensas de ningún país de la región. No cejará ni un momento en salvaguardar su soberanía y seguridad nacional en circunstancias y situaciones cada vez más peligrosas y amenazadoras, confiando en la ayuda de Alá Todopoderoso y en la voluntad y determinación de su pueblo.