La página web oficial del lío sugiere que mañana celebremos el día del blog recomendando y enlazando 5 blogs "preferentemente diferentes a nuestra propia cultura, punto de vista y posición". Se trata de descubrir y dar a conocer nuevos blogs para fomentar la diversificación y expandir este tinglado del posteo.
Mañana será divertido darse una vuelta para ver cómo enfocan esta propuesta determinados blogeros de la familia de los megaplastic que no enlazan a nadie ni borrachos o aquellos que llevan enlazándose de forma obsesiva durante años.
Pero eso será mañana, ahora debes leer este revelador documento que ve la luz gracias a una profunda tarea de investigación llevada a cabo de uno de los puntales con barba de la blogocosa mundial y que publica íntegro en su blog de escalofriante influencia.
Inquieto cada vez más ante las inquietudes que me inquietan y queriendo dar desahogo al ahogo que me producen, hace una semana decidí crear un blog para mis momentos de intimidad pública. El lunes escribí lo mal que me cae el jefe en la puerta del lavabo del excusado, un clásico de la introspección. El martes lo escribí en la máquina del café, promoviendo la tertulia. El miércoles lo escribí en el techo de la oficina, cambiando puntos de vista. El jueves lo grabé con un buril en el parabrisas de su coche nuevo, ampliando horizontes. El viernes me despidieron, total, por un blog.