
Trump disfrutando de la Segunda Enmienda. Viñeta del 14/07/2024 en CTXT
Estas cositas son fáciles de escribir porque no hace falta explicar mucho. Ya no queda humano terrestre no haya visto esta foto, y otras, del intento se asesinato de Donald Trump en ese país donde te regalan un fusil semiautomático AR-15 comprando un paquete de magdalenas.
No es vano, desde 2013, tienen hasta un contador de gente que espicha por armas de fuego.
Ya nos han colocado la estampita "épica", la misma que los trumperos enarbolan ya como bandera de su, para ellos, inevitable triunfo en las presidenciales del 5 de noviembre de este año. No sólo agitan la foto, hasta se vendan la oreja como si fuera el sello sagrado de su secta.
La primera aparición del naranjito tras el disparo en el lóbulo fue en la última jornada de la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, donde un Hulk Hogan (también naranja) asistió al casamiento de Trump y se rompió la camisa dejando a la peli Idiocracia a la altura de un cuento infantil.

En ese mismo acto, el delincuente de Trump hasta besó el casco del uniforme de un bombero con que el que habían disfrazado un palo como homenaje a una de las personas que murieron el día del atentado.
Y mientras tanto, el pocho seguía enrocado diciendo que no se iba, que a él sólo lo retiraría Yisus, el que todo lo puede, pero a la vista del panorama ayer terminó claudicando.
Los demócratas han decidido que sea Kamala Harris, la vicepresidenta, la que se juegue la Casablanca con Trump.
Ahora a ver quién es el guapo que no compra sin rechistar la cosa wonderful con la que ya se bombardea desde muchos medios de que sería la primera mujer presidenta de los estates cuando, si se da el caso, siga apoyando cómodamente el genocidio en Palestina (y donde se tercie) desde el despacho oval igual que hizo el pocho.
Poco o nada importa de qué color la pintes, la viga sigue estando infestada de carcoma.