
Abogados cristianos y el cómic. Viñeta del 19/05/2024 en CTXT
El 17 de mayo, la fundación "Abogados Cristianos" anunció una querella contra el dibujante Julio A. Serrano, "Don Julio" y la editorial Fandogamia por el cómic "El niño Jesús no odia a los mariquitas" por supuestos delitos de "provocación a la discriminación y al odio, y por provocación sexual".
Confieso que ya me da pereza tener que volver a escribir las mismas cosas sobre lo mismo una y otra vez, pero nunca está de más porque los denunciantes sólo buscan instaurar el efecto desaliento. O lo que es lo mismo, un aviso, más bien una amenaza a navegantes para que el próximo artista que se plantee tocar determinados temas se lo piense y termine autocensurándose.
El efecto de desaliento, legalmente hablando, es una forma de denominar al resultado disuasorio indirecto que sobre el ejercicio de un derecho fundamental produce la sanción penal de una conducta ilícita pero muy cercana a las que resultan amparadas por el derecho en cuestión, razón por la cual se estima que recurrir al Derecho penal para sancionar esas extralimitaciones resulta desproporcionado y en muchas ocasiones incluso más allá de lo absurdo.
De esto saben mucho en esa Fundación de abogados de Yisus, expertos en perder demandas, que lo usan como excusa escudándose tras los prehistóricos y muy derogables, cuando menos reformables, artículos 524 y 525 del Código Penal para seguir con su cruzada medieval contra el aborto, la eutanasia o cualquier cosa que contenga crítica o parodia con alguna relación con la iglesia o la religión. Explotan y retuercen todo lo que pueden la particular interpretación de la blasfemia rebautizada como "delito contra los sentimientos religiosos" en el Código Penal.

"El niño Jesús no odia a los mariquitas" es un cómic para adultos de Julio A. Serrano. Un ejercicio satírico que denuncia la homofobia editado por Fandogamia y que simula el aspecto de los cuadernos infantiles para colorear. La primera entrega de esta serie, del mismo autor, se tituló "Ser fascista está mal".
Pues bien, el cacao se monta después de unas notas churretosas, porque a esto que hicieron muchos medios no se le puede llamar noticia, en la que se cita a un librero de Pontevedra que ha dicho que patatas y que por lo tanto es "viral" porque Elon Musk ha dicho no sé qué mierda. Sin más. Periodismo de pegotear un tuit y a otra cosa. En ninguna de estas piezas iniciales se contacta con el autor ni con la editorial.




Lo que vino después fue un intento de hacerle creer al personal que se trataba de un libro para niños, algunos incluso deslizaron que se distribuía en colegios, algo absolutamente falso y siguieron mintiendo a sabiendas. Otros fueron mucho más allá y con el bulo montado ya hablaban hasta de pedófilos.
Si bien alguien podía seguir agarrándose a que el aspecto de la publicación podía dar lugar a confusión (obvio porque se trata de una parodia del estilo de un cuadernillo de colorear), el editor de Fandogamia, Pedro F. Medina no intentó escurrir el bulto y explicó con detalle y desde el primer momento que esa supuesta calificación de edad que sirvió de banderín de enganche de los garrulos no había salido de la editorial, sino de las plataformas y puntos de venta ya que "además de añadir lo de 'a partir de 6 años' en mayúsculas se ha eliminado deliberadamente la frase “para adultos” de la descripción. Uno podría pensar que alguien ha ido a mala idea".
Para no extenderme y escribir lo que ya he escrito veinte veces y otros han redactado mejor, les remito a esta entrada en el blog de Gerardo Vilches, de recomendada lectura para aquellos que aún no saben si son adultos mentales.
Aprovecho para volver a recordarle a esta nueva manta de obtusos integristas que la libertad creativa no puede estar, ni estará jamás, en manos de un chiringuito de ultracatólicos con alma de teócratas a los que, por cierto, habría que cortarles ya el rollo por abusar del sistema judicial.
Y que, por obvio que le pueda resultar a cualquier persona con al menos dedo y medio de frente, toda obra de ficción no tiene más límites que aquellos que quiera ponerle su autor.
- El número #161 de El Estafador está dedicado a este asunto. Galería de viñetas.
Actualización. En noviembre de 2024 se archivó la querella. La juez impuso el sobreseimiento de la causa ya que “no se aprecia la comisión de delito alguno”.
Relacionado:
El humor en apuros, recopilación de casos
Casos de dibujantes que han tenido problemas de cierta importancia a causa de sus viñetas o ilustraciones satíricas. También hay algunas historias de otras personas que, sin ser dibujantes, han tenido problemas por compartirlas.